miércoles, 3 de julio de 2013

chinchillas

La chinchilla es un roedor muy hábil gracias a la estructura de sus patas traseras que, al ser más largas que las delanteras, le permiten realizar grandes saltos y acrobacias.
Mide entre 20 y 25 centímetros y pesa 750 gramos. Además, su composición corporal repele los parásitos externos.

                                                 ALIMENTACIÓN
 se aconseja darle diariamente una dieta a base de pienso especial para chinchilla acompañado de heno. También les gusta comer manzana o pera. En algunas tiendas para mascotas se venden unas pastillas especiales que les aportan calcio y vitaminas.

                                         JAULAS Y MANTENIMIENTO
Conviene tenerla en una jaula de rejas, preferiblemente de metal, y que sea de gran tamaño y de varios pisos para que se pueda mover con total libertad y saltar de un lado para otro. En el caso de ser hembra se recomienda tenerla en una jaula de mayores dimensiones, por que es más grande que el macho.
El suelo de la jaula debe estar cubierto de viruta de madero. No se debe usar arena para gatos, ya que      
el polvo de esta puede dañarle sus vías respiratorias.
Se le debe meter en su jaula un trozo de madera para que juegue y otros juguetes, ya que son animales muy juguetones y divertidos y necesitan entretenerse. Las chinchillas necesitan ser sacadas de su jaula y soltarlas por la casa para que puedan explorar y correr, eso les encanta.
Son animales muy silenciosos y limpios, son curiosas y exploran mucho. Se recomienda darle un compañero, especialmente si es una pareja, porque así podrá ser feliz y relacionarce con otro de su misma especie.

                                        CONDICIONES AMBIENTALES
Habitan en la región de Los Andes en América del sur. 
Lo más fundamental para mantenerla en unas condiciones similares a las de su hábitat natural es criarla en un lugar cerrado, lejos de las altas temperaturas. También es necesario que esté bien ventilado, sin que la corriente recaiga directamente en los animales. La temperatura ambiente más recomendada es de 18ºC, con una humedad nunca superior al 40%. Así, se sentirá cómoda al ser un roedor nocturno procedente de lugares montañosos, secos y poco acostumbrados al calor.